Teguise recibirá 400 mil euros para ejecutar el proyecto turístico Del Mar al Río de los 2,5 millones de euros que irán destinados a ECO-TUR


Representantes de 17 destinos turísticos de Canarias, Azores, Madeira Cabo Verde, Mauritania y Senegal forman parte de un seminario que pone en valor el patrimonio natural y etnográfico de cara al turismo

El Convento Santo Domingo de La Villa de Teguise acogió en la mañana de este lunes la jornada de arranque del I Seminario Transnacional de Intercambio de Experiencias, con una misión y objetivo común para los 17 participantes en el mismo, tal y como expresó el alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, durante la presentación. “La prioridad es poner en valor nuestro patrimonio natural y etnográfico de cara al turismo, y hacer atractivo nuestro modo natural de vida a los ojos de los que nos visitan, con especial hincapié en diferenciar lo más auténtico de la cultura, el paisaje y lo genuino de cada destino y de sus gentes”, declaró Betancort.

Durante dos días, Teguise es anfitrión y cabeza de lista de los municipios invitados, procedentes de toda Canarias, de Azores, Madeira, Cabo Verde, y de Senegal y Mauritania. Una experiencia única que tiene como eje central la cooperación transfronteriza y transnacional de todos los que conforman el espacio de cooperación territorial y al que Teguise tiene el honor de acceder como institución con mayor financiación recibida, con 400.000 euros que irán destinados al proyecto “Del Mar al Río”, pero que en su totalidad contará con un presupuesto de 2.546.852,75 euros.

Gracias al apoyo del programa MAC 2014-2020 (Interreg) impulsado por la Unión Europea, se inicia este proyecto denominado ECO-TUR, que promueve la creación de la red transnacional de municipios ECO-TUR para establecer una estrategia y metodología conjunta para el fomento del ecoturismo y el turismo activo, así como la implantación sobre el territorio de los planes de acción desarrollados por la red y la promoción de los nuevos productos y servicios para el fomento del ecoturismo y el turismo activo.

“Tal y como les ha transmitido a los invitados al seminario durante la presentación del mismo, considero que esta es una oportunidad única de aprender los unos de los otros compartiendo conocimiento, y una extraordinaria muestra de que hacemos sociedad y trabajamos para ella. Recuperar el sentimiento de pertenencia y orgullo cada uno de su patria chica, en definitiva, alentar el sentimiento de propiedad”, añadió Oswaldo Betancort durante su ponencia.

“Estoy convencido de que encuentros como este, generarán amplias posibilidades de intercambio de experiencias y de lecciones aprendidas. Al fin y al cabo, son manifestaciones de cooperación y unidad, que son muestra fehaciente de la vocación pacífica y cooperativa que fortalece a nuestras naciones, desde las instituciones que las integran hasta los individuos que participan a quienes quiero rendir un homenaje en este escenario”, concluyó Betancort.

Del Mar al Río, de Costa Teguise a La Graciosa

El proyecto “Del Mar al Río” trata de unir físicamente ambas costas entre Costa Teguise y Caleta de Sebo, a través de nodos intermedios que articulen este recorrido, favoreciendo la versatilidad del mismo para atraer al mayor número de usuarios, colectivos o actividades integrando aspectos como la accesibilidad universal, de perros, bicicletas, celebración de competiciones deportivas, etc.

En este sentido, juegan un papel fundamental aquellos lugares de Teguise que resultan de interés, como la Playa de Las Cucharas, las Salinas de Las Caletas, el Volcán de Tahiche, LagOmar, la Villa de Teguise, las Caleras de Chimía, el Risco de Famara, la Caleta de Famara y Caleta de Sebo en La Graciosa.

La implantación efectiva del proyecto “Del Mar al Río” requiere de una serie de objetivos corto, medio y largo plazo, con el acondicionamiento del recorrido, la restauración ambiental y paisajística, así como labores de promoción, diversificación de la oferta o la implantación y desarrollo de nuevas actividades.

La consecución de los mismos dará la oportunidad de experimentar el contraste de realidades que se produce entre ambas orillas del municipio, lo cual es un atractivo para diferentes perfiles de visitantes y repercutirá positivamente en el paisaje.