“No nos cansaremos de decir que el reconocimiento de La Graciosa como octava Isla Habitada de Canarias lleva implícito una serie de compromisos con sus ciudadanos y con los profesionales que ejercen allí su actividad económica”, ha manifestado Betancort
El alcalde de Teguise, Oswaldo Betancort, se reunió hace unos días con el presidente de la Cofradía de Pescadores de La Graciosa, Gregorio Páez, para conocer de primera mano la situación que atraviesa el sector pesquero, azotado como tantos otros por la crisis sanitaria y la consiguiente crisis económica, durante la cual, los pescadores no han recibido la ayuda prometida.
En ese sentido, Betancort, como alcalde de Teguise y La Graciosa, y también como diputado parlamentario por Lanzarote, se ha unido a las reivindicaciones de las cofradías de Lanzarote y La Graciosa, que cuestionan la merma de ingresos por parte del Cabildo de Lanzarote y del Gobierno de Canarias para poder afrontar una situación adversa, “en la que están padeciendo los efectos negativos de la nula actividad turística en la isla y de la escasa demanda y venta al exterior”.
“Nos gustaría que las subvenciones previstas por la máxima institución insular se materializaran para que las cofradías pudiesen sufragar sus gastos de 2020 y sobrevivir a la pandemia”, y tal y como han denunciado los propios afectados, “que las medidas sean reales y efectivas, más allá de la venta de humo de la consejería del área en Lanzarote, que coordina Ángel Vázquez, y su homóloga en Canarias, Alicia Vanoostende, que prometieron inyectar liquidez al sector, cuando la realidad es que han reducido la partida presupuestaria con respecto a ejercicios anteriores”, ha añadido Betancort, lamentando “la disminución de subvenciones no solo en materia pesquera, sino también para el sector agrícola y ganadero”.
Justo reparto de las cuotas de atún
Asimismo, Oswaldo Betancort secundó la protesta que desde hace meses están llevando a cabo los pescadores de La Graciosa, que exigen un reparto equitativo de las cuotas de atún con respecto al resto de Canarias.
“No nos cansaremos de decir que el reconocimiento de La Graciosa como octava Isla Habitada de Canarias lleva implícito una serie de compromisos con sus ciudadanos y con los profesionales que ejercen allí su actividad económica”, ha manifestado Betancort, que solicita “una justa distribución y que se incluya también a los marineros que faenan en las embarcaciones artesanales y no solo a los atuneros, puesto que están siendo excluidos de un reparto del que dependen muchas familias”.